Salud y bienestar

Publicado 24/07/2022

alimentos más saludables para tu hígado


El hígado uno de los órganos que más funciones cumple.

Se encarga de liberar la sangre de sustancias nocivas, como el alcohol y las drogas; usa el azúcar como fuente de energía cuando los niveles están bajos y es una fuente de provisión de hierro para el cuerpo.

Y así como los excesos sostenidos pueden causar serios daños en este órgano (como cirrosis o falla hepática por abundante consumo de alcohol), existen algunos alimentos que pueden ayudar a mejorar su funcionamiento.


Cuando el hígado está “cargado” por exceso de trabajo (mala alimentación, sustancias tóxicas...) todo tu organismo se resiente. Por eso es importante mantener una dieta equilibrada y una vida sana para que nuestro hígado pueda funcionar correctamente. El hígado es clave para eliminar las toxinas sobrantes del cuerpo, y eso beneficia a todo el organismo. Cuídalo y te sentirás más ligera y saludable.


UNA DIETA COMPLETA PARA EL HÍGADO

Para cuidarlo debes con una dieta ligera, baja en grasas y rica en vegetales. Sobre todo...

Espárragos, brócoli, berros, col, coles de Bruselas, ajo y cebollas porque son fuente de glutatión. Este compuesto es un potente antioxidante que protege las células hepáticas de las agresiones causadas por los radicales libres, el alcohol o por el consumo de fármacos a largo plazo.


La papaya y el aguacate, así como especias como el comino y la canela también ayudan al cuerpo a producirlo. Son alimentos que no pueden faltar en tu dieta si quieres tener un hígado saludable.


Vitaminas B1, B6 y ácido fólico (vegetales de hoja verde, legumbres, cereales integrales, frutos secos...) y vitamina B12 (carnes poco grasas, pescados y lácteos desnatados) son básicos para que las enzimas hepáticas realicen sus funciones.


LO QUE TU HÍGADO NECESITA

Además de vegetales ricos en glutatión o vitaminas del grupo B, te conviene:

  • Añadir ajo, cebolla o cúrcuma a tus ensaladas o platos. Son alimentos hepatoprotectores.

  • Tomar vegetales de hoja verde como espinacas, acelgas o alcachofas; lechugas como la escarola, verduras de tallo como el cardo o el apio, germinados...

  • Usar aceite de oliva virgen, tanto en crudo como para cocinar. Su ácido oleico, vitamina E y polifenoles protegen el hígado.